Una entrevista innecesaria

En casa aún nos estamos preguntando qué hacía Francis Franco (El Pardo, 1954) en La Sexta Noche. El nieto mayor del dictador, Marqués de Villaverde, Señor de Meirás, Grande de España y administrador de la inmensa fortuna de los suyos, aprovechó la audiencia del prime time televisivo para continuar con la apología del franquismo iniciada a raíz de la exhumación de su abuelo, que, en vez de hacerse en familia y en la más absoluta discreción, gozó de riguroso y largo directo hasta el punto que dio la sensación de que el Gobierno en funciones, más que reparar una histórica injusticia, le rendía honores. Francis Franco, en la entrevista que le hizo Iñaki López, estuvo más bien disperso (los vídeos le salvaron de más de un silencio difícilmente explicable) y, además de darle al gobierno y elogiar al dictador, el único titular que dejó, y que luego al ser repreguntado sobre el tema rectificó a medias, fue que el ahora rey emérito fue quien dispuso que fuese enterrado en el Valle de los Caídos para disgusto de su abuela. Francamente, si no le hubiesen invitado, habrían quedado mejor.