BOIG PER TU
Adiós a la voz
Se dice, y creo que de manera muy acertada, que cuando se muere un actor de doblaje algo también se muere en nuestra memoria. Es natural. Los de nuestra generación, por aquella orden del franquismo que prohibía las versiones originales, aprendimos a amar el cine por los dobladores. Incluso con afirmaciones tan peregrinas de que fulanito o menganita “trabaja bien” basándonos en su voz en la pantalla. Ahora acaba de dejarnos uno de los más grandes, Arseni Corsellas (Girona, 1933). Ahí es nada su currículum con más de 1.000 doblajes a sus espaldas poniendo su talento al servicio de Sean Connery, en 21 ocasiones, con toda la saga Bond incluida; Rock Hudson (19), Burt Lancaster (17), Charlton Heston (14) y un largo etcétera que va desde Gary Grant hasta Humphrey Bogart (a quien le puso voz en 1966 en la versión definitiva de Casablanca), pero aquí le recordaremos aún más por ser J.R. en la versión catalana de Dallas en TV3 o esas promociones de los largometrajes que se emitían en Sant Joan Despí. En este caso, y pese a lo que se diga, su memoria seguirá viva.