BOIG PER TU
Del rosario al besazo
Pasada la una y media de la madrugada (que ya no son horas para un programa supuestamente familiar y en día laborable) se despejó la incógnita sobre quién iba a ser el ganador, en este caso ganadora, de la última edición del MasterChef Celebrity: la gran favorita Tamara Falcó (Madrid, 1981), que con sus habilidades culinarias rompió con su estereotipo de mujer que necesitaba un GPS para encontrar la cocina de su casa. A los que nos sigue gustando la cocina tradicional, la de la abuela, nos dejan bastante indiferentes los rebuscados platos de la ganadora, aunque reconocemos que se lo ha currado a base de bien. Y además ha dejado para la historia gloriosos momentos televisivos como su truco para concentrarse ante los fogones, que no es otro que rezar mentalmente el rosario o el incesante coqueteo con uno de los jurados, Jordi Cruz, que culminó con un besazo monumental al saberse ganadora. Y aún otro. La presencia en plató de su madre, la mismísima e inaccesible Isabel Presley, acompañada de su actual pareja, Vargas Llosa. En Mediaset les reconcomía la envidia.