¡Cómo llora Roncero!

Tal y como se puso Tomás Roncero en El Chiringuito de Mega tras la derrota de su Madrid ante el City de Guardiola era para recordarle aquello, que nunca se sabe si fue cierto o no, de Boabdil El Chico, y porque, en realidad, él no tuvo la culpa del descalabro en el Bernabéu, pero sí que el periodista del AS y colaborador habitual del programa ha dejado crecer tanto a su personaje público que se le ha comido a la persona y ya resulta imposible de discernir quién es uno y quién es otro. El caso es que Roncero rompió a llorar como una magdalena cuando recordó que para esta cita de la Champions se llevó a la grada del coliseo blanco a su hijo pequeño y a un amigo del colegio (previo pago de entrada como entre sollozos se avino a recordar) para disfrutar de la experiencia como años atrás, hizo lo mismo su padre con él. Y su hijo, es de suponer que tan merengón como él, estalló en lágrimas con el silbato final del árbitro (al que culpó de todos los males del equipo de Zidane) para rematar con un patético “¡ojalá mi padre no me hubiese aficionado al futbol de pequeño”! ¡Qué pena!