BOIG PER TU
Yo no quise ver la Bundesliga
La Bundesliga es ahora mismo faro, guía y directriz del futbol mundial. Espejo en el que se miran las grandes ligas. El sábado reanudó la competición pero me negué a ver ninguno de sus partidos. No por falta de ganas ni de medios para hacerlo, pero sí por (in)sana envidia de ver cómo el futbol alemán lo ha hecho mejor que el de aquí, todo confusión. Y eso que no hubo minutos de silencio pese a sus 7.900 muertos y 170.000 contagiados. En más de una ocasión hemos disentido de las decisiones tomadas por el presidente del Esportiu, Albert Esteve, pero en este caso estamos totalmente de su lado. RFEF, Liga, AFE y CSD se han conchabado para salvar el chiringuito, solo por intereses económicos, y evitar la quiebra total del negocio en Primera y Segunda División y, en cambio, han ninguneado a la Segunda B, que quieran o no, también es profesional, con unos play off exprés que van a adulterar y devaluar la competición y con una propuesta para la 21-22 con cien equipos que la harán más ruinosa aún si cabe. Estamos con Esteve. O jugamos todos o rompemos la baraja.