BOIG PER TU
Si no es por no ir...
Las múltiples contradicciones (hoy blanco, mañana negro y pasado gris) que hemos visto, oído y leído durante el confinamiento, y posteriores fases, provocadas por la pandemia, nos han retrotraído a aquel mítico gag televisivo de José Mota con el socorrista playero escaqueándose ante un bañista con problemas al grito de “si no es por no ir. Si hay que ir se va, pero ir para na es una tontería”. Tampoco es una novedad. Basta con ir a la hemeroteca de años atrás para poder sacarle los colores a políticos, dirigentes, empresarios y gente de la farándula. Pero ahora los “renuncios” se han multiplicado a todos los niveles (y aunque nos duela, incluso nuestra Paeria se coloca en el top five de los que “donde dije digo, digo Diego”). Cambios continuos en las estadísticas de muertos y contagiados, y cabe añadir lo de la campaña “Quédate en casa”, que ahora ha mutado a “no te quedes en casa” o “quédate en España”, o la de Podemos, de entusiasta partidario de la Comisión para los chanchullos del rey emérito a la de no hace falta la de Felipe González por lo del GAL y, poco después, rectificación incluida.