La dupla turca arrasa

No sabemos qué tienen las teleseries turcas para provocar adicción entre los espectadores allá donde se emiten. O mejor dicho, sí que lo sabemos: presupuesto. Con él, y con evidentes dosis de talento, han sido capaces de desbancar en el mercado audiovisual, sobre todo en el europeo, a las anteriores producciones que reinaban a sus anchas procedentes de Venezuela (sobre todo), México, Brasil o Argentina. En España entraron por la puerta de cadenas minoritarias (Neox, Divinity...) hasta que las grandes se dieron cuenta de su potencial, especialmente Atresmedia, que ha encontrado en ellas un verdadero filón. Un buen ejemplo de ello lo tuvimos este lunes. Antena 3 ofreció, bajo el título genérico de Una noche de emoción, el piloto de la nueva serie Mi hija (2018) y uno nuevo, aún inédito, de Mujer (2017). Entre los dos superaron el 30 por ciento de la audiencia televisiva. Derrotaron a Telecinco, que, con su Piratas del Caribe: La venganza de Salazar, se quedó con un 11,3, y arrasaron a la gala de Inocente, Inocente de La 1, que se quedó con un mísero 10,7.