Una lanza en favor de La 2

Ciertamente, TVE está en horas bajas. Sus audiencias, bajo mínimos, casi residuales.

Su prestigio en informativos, nulo. Su Proyecto Catalunya, un desastre.

De su parrilla televisiva se salvan muy pocas cosas. Claro que siempre nos quedará La 2, una cadena para una selecta minoría, con sus recurrentes documentales, su incombustible Saber y ganar, aunque ya se vea más como una pieza de museo que por otra cosa, y..

su programación de clásicos del cine la noche de los lunes (hasta no hace mucho se emitían los martes) que nos permite reconciliarnos con la pública y reencontrarnos (para algunos, más jóvenes, igual es descubrirlos) con títulos que marcaron nuestra infancia o nuestra adolescencia bien en las salas de cine o ante el televisor (en blanco y negro, por supuesto). Quizás le falta, como guarnición, un debate, sobre la película o sobre el tema, pero entonces ya sería el añorado ¡Qué grande es el cine! o la mítica La clave.

En cualquier caso, hay que darle las gracias a La 2 y al responsable de la idea por hacer posible que podamos disfrutar con el cine en mayúsculas.