BOIG PER TU
¡Pues no ganó la favorita!
Los designios de las audiencias televisivas, como los del Señor, son la mayoría de las veces, inexcrutables. Este jueves, con el boato que caracteriza a Mediaset, se puso punto final (bueno, es un decir porque hoy se celebrará una nueva gala con Jordi González de anfitrión) a 105 de un reality, La casa de los secretos o de Secret Story como prefiere llamarlo Don Paolo, que no pasará a la historia del género. Pues bien, suprimidos los Gemeliers en semifinales, la gran favorita para llevarse el premio era la leridana Cristina Porta, a la que desde el propio programa la han promocionado a base de bien dándole más minutos en los resúmenes que a nadie.
Sin embargo la audiencia, a última hora (y vamos a pensar que todo discurrió como marcan las normas), se decantó por Luca Onestini. Por cierto, que si la memoria no nos traiciona, es la primera vez que dos hermanos ganan dos realities en la cadena (Carlo se impuso en Supervivientes). La audiencia fue floja y la pelotera en directo entre Jorge Javier Vázquez y Lucía Pariente de vergüenza ajena.
Veremos lo que dura el noviazgo.