La sombra de Chikilicuatre

Hace unos días, el genial José Luis Martín, en su viñeta de La Vanguardia, hacía referencia a las tormentas en vasos de agua que generan las redes (hay quien las califica como heces) sociales. Ahora han generado otra a raíz del Benidorm Fest, concurso que, además de resucitar el popular en su día festival de la canción con sede en la ciudad alicantina, debía de servir para escoger al representante de RTVE para el próximo festival de Eurovisión este mes de mayo en Turín. Ganó Chanel Terrero (La Habana 1991, aunque desde los tres años vive en Olesa de Montserrat) y ha ardido Troya.

Uno podría pensar que las derrotadas tienen muy mal perder pero más que ellas han sido sus seguidores, que han colapsado las redes llegando al insulto personal a la ganadora. El problema estriba en colocar a dos jurados, el profesional y el popular, porque sus designios nunca coinciden (en Eurovisión lleva años ganando el tema votado por el público y nunca el escogido por los expertos). En RTVE hacen lo imposible para que no se repita el caso Chikilicuatre del año 2008 y ahí está el tema.