Mágico e irrepetible

Dentro de la difícilmente comprensible programación de Esport3 (si a lo largo de la semana se suman los programas se emiten más del Canal 33 que deportivos) existe un cajón de sastre, un recurso para llevar minutos y tapar agujeros que responde al nombre de No tenim vergonya, que no es otra cosa que tirar de archivo y buscar joyas de la programación de la casa de años atrás (en Esport3, menos mal, se centran solo en el deporte). Y en el post-partido del primer asalto del Barça-Palma de futbol sala pudimos ver una joya del pasado, que es de suponer que pasó poco menos que desapercibido (igual que la audiencia del canal). Resulta que a finales de los 80, cuando el Espanyol de Clemente jugó y perdió, de manera inexplicable, la final de la UEFA ante el Leverkusen, TV3 envió un equipo de reporteros a la concentración perica de pretemporada.

Entraron en la habitación de Miquel Soler y un compañero y los pillaron levantándose de la cama, cepillándose los dientes y bajando al comedor a desayunar. Hoy en día, esto es absolutamente impensable si no eres un youtuber.