Deberes para Gras

A Sigfrid Gras i Salicrú (Barcelona, 1967) acaban de nombrarlo, aunque ya ejercía en el cargo de manera provisional, nuevo director de TV3  (al compañero y amigo Jordi Borda lo han puesto al frente de Catalunya Ràdio). Tiene mucho trabajo por delante para recuperar la audiencia perdida. Su declaración de intenciones parece interesante: menos programas sobre política, que pretende circunscribirlos a los informativos, y más espacios de entretenimiento (el éxito de Euforia puede ser decisivo) sin perder los signos de identidad de la televisión pública catalana. Pero ya puestos, y aunque el reto puede resultar homérico, no estaría de más que sacudiese el apoltronamiento en que parecen haber caído el resto de cadenas de la casa.

El 3/24 resulta extremadamente aburrido con tanto bucle interminable. Esport3, ya lo hemos escrito otras veces, cada vez tiene menos deportes pese al fondo de armario de la casa. El Super 3 se ha convertido en una sucesión de cortos de animación sin demasiado sentido y el 33 ofrece muy poco y abusa de redifusiones el mismo día.