BOIG PER TU
La excelencia que no cesa
A este paso vamos a tener que dejar de comentar los programas de El foraster porque se nos están acabando los calificativos elogiosos para Quim Masferrer y los suyos y acabaríamos entrando en un bucle del que no íbamos a poder salir nunca más. Este lunes, El foraster y los suyos se fueron hasta Castellserà y el resultado fue otro programa redondo en el que se alcanzó por enésima vez la excelencia. Empatía, complicidad y risas no exentas de emoción con la compañía teatral Campi Qui Pugui, que desde Castellserà salía de viaje para actuar en Kaunas, en la lejana Lituania; la mágica casa del Mag Lari y su pareja, el laberinto de maíz que Josep lleva ya diecisiete años diseñándolo para pasmo de visitantes; Juan, el responsable de la central hidroeléctrica del pueblo, o el Juanillo, el alma desde la grada del equipo de la localidad.
Sin embargo, con quien nos quedamos es con Julita, testimonio con la que abrió el programa: 87 años y viaja en su moto a diario al huerto mientras guarda en su congelador una serpiente con dos cabezas que utiliza en sus guisos.