¡Muchas gracias, Claudio!

Con el adiós de Paolo Vasile, en forma de cese o jubilación, de Mediaset (mañana tocamos el tema, que da para mucho), íbamos a pasar por alto el fallecimiento de un ilustre que tantas y tantas satisfacciones dio a varias generaciones en las décadas de los 80 y 90 a través de la pequeña pantalla. Nos estamos refiriendo a Claudio Biern Boyd (Palma de Mallorca, 1943). Biern Boyd, que aún tuvo tiempo y ganas para ser directivo de peso en el Espanyol, fue uno de los padres de la animación de este país.

De entre su producción, recordemos algunos de sus títulos más emblemáticos como Ruy, el pequeño Cid, D’Artacán y los tres mosqueperros y La vuelta al mundo de Willy Fog (con la canción, que todos hemos tarareado alguna vez a cargo de Mocedades). Pero la serie que de verdad, de verdad, marcó a pequeños y mayores fue David el Gnomo, adaptación de un cuento alemán que creo adicción en este país en 1985 y con tan solo 26 entregas. Nos hicimos incondicionales de David, Lisa, Swift y de los torpes orcos.

Por todo eso, y mucho más, muchas gracias, Claudio. De verdad.