El (falso) cebo

Curioso el caso. Después de más de tres horas anunciándolo, en Fiesta decidieron no dar unas imágenes (es de suponer que ciertas) de Rafa Mora haciendo barbaridades presuntamente en estado altamente etílico. La razón, aconsejada por los servicios jurídicos de Mediaset y la dirección del programa, fue que “cinco minutos en la vida de una persona no representan el todo de ella”.

Decimos curioso porque, en Mediaset, por menos de ese tiempo han destrozado reputaciones a lo largo de días y días de emisión. Eso sí, estuvieron esos 180 minutos manteniendo la intriga de quién era y visitando los platós en los que colabora. Dicho esto, tres reflexiones.

A) Al decir el nombre del pecador y no el pecado (eso se ha sabido después), dejan el campo abierto a las especulaciones, que no fueron pocas en las redes sociales. B) Si se trataba de fake news, y por eso no se dieron las imágenes, fue una fea manera de hacer audiencia con el morbo ajeno y dar cancha al Sálvame de ayer. C) ¿No hubiera sido mejor no decir nada y, llegado el caso, si procede, explicar el tema con pelos y señales?