BOIG PER TU
Morirá de éxito, seguro
A veces cabría saber el por qué, a los sesudos programadores televisivos les da, como si no hubiera un mañana, por exprimir como si de un limón se tratara a sus productos más exitosos. Podemos entender que mientras dure la racha adelante con los faroles, pero a Antena 3 habría que recordarle que hasta el más productivo de los filones se acaba agotando. Y ese es el riesgo que se está corriendo con la figura de Joaquín Sánchez, el todavía jugador del Betis.
Paradigma de aquel que el que todo lo que toca se convierte en oro, es una figura televisiva. Lo era a través de sus apariciones en El Hormiguero. Arrasó en El novato, que fue lo más visto de los últimos meses, y ahora, sin tiempo a descansar, Atresmedia ha estrenado La penúltima y me voy, en ocho entregas, que es más de lo mismo que su anterior show, explicando sus interioridades familiares y deportivas.
Todo un éxito, sí, con un estratosférico 18,6 de audiencia y más de dos millones de seguidores, apabullando a La 1 con su teóricamente imbatible Benidorm Fest (9,4), donde, por cierto, no triunfó la apuesta en catalán.