Arrollador, sí, pero con taras

Era de esperar, pero no por ello es menos de aplaudir el impresionante estreno de la décima temporada de Tu cara me suena en Antena 3. Apabulló (22,9 a 10,3) al Deluxe de Telecinco. Un espectáculo redondo, con coreografías excelentes, presentación de impresiones y altísimo nivel en los participantes.

Ganó la primera gala Andrea Guasch (Barcelona, 1990), de la que no teníamos demasiadas referencias, con una impactante imitación del SloMo de la eurovisiva Chanel. Todo perfecto, sí, pero hay elementos que chirrían, de hecho se repiten los errores de temporadas anteriores. El más grave, a nuestro juicio, es el de amontonar los bloques publicitarios al principio y final de la gala.

Desde el final de la información metereológica hasta el inicio real del show, transcurrieron 20 minutos, cronometrados en casa. Desde la última actuación hasta las votaciones del jurado, 15. Y aún hay más.

Sobra el excesivo peloteo del jurado y presentador a los concursantes y alguien debería aconsejarle a Àngel Llàcer que cierre de una vez la boca ante cada actuación. Sus muecas de asombro resultan cargantes.