Reporteras de (mucho) riesgo

n Las reporteras, y también los reporteros, como no, eran siempre especies de riesgo. Mientras sus jefes estaban cómodamente apoltronados en el plató, a ellos/ellas les enviaban a cubrir, en vivo y en directo, inundaciones, temporales de agua, viento o nieve, soportando temperaturas por encima de los 40 o por debajo de los cero grados. Pero ahora el peligro aumenta.

A Isa Balado, en pleno directo para En boca de todos de Cuatro, le acosó un descerebrado, haciéndose el gracioso, y le sobó el culo mientras ella trabajaba. Y no solo eso. Insistió en el acoso sin salirse del foco de la cámara.

Nacho Abad, desde el estudio, llamó a las fuerzas del orden y el agresor fue detenido poco después. Hasta aquí, dentro de lo malo, todo correcto, pero el caso es que la jueza que llevaba el caso lo ha dejado en libertad, sin cargos y sin medidas cautelares (ni alejamiento ni comunicación con la periodista) al no apreciar ninguna situación de riesgo, intimidación ni violencia. Sin duda es el perfil del magistrado/magistrada que desearía encontrar el propio Luis Rubiales cuando se vea lo suyo.