Un ‘joc’ con malos modos

En casa no somos mucho del Joc de cartes de TV3. No porque no resulte entretenido, a veces, o polémico, casi siempre, sino por la propia mecánica del ¿concurso?, ¿reality?, ¿divulgativo gastronómico?.. El espacio presentado por Marc Ribas fomenta la competencia, muchas veces desleal, entre los profesionales del sector y hace del mal rollo su hábitat natural bajo propuestas peregrinas como buscar el mejor local de lo que sea. Y claro, los participantes han bebido en las fuentes de todos los realities de Mediaset y saben que sus minutos de gloria serán directamente proporcionales a las polémicas generadas y multiplicadas por el altavoz de las redes sociales. Esta semana, sin ir más lejos, se buscaba al mejor fogón de “mongetes de ganxet”. Evidentemente, las legumbres quedaron en un segundo plano ante la desbordadora presencia de Pilar Salazar de La Granja de Vacarisses. Con la lección bien aprendida, se dedicó en cuerpo y alma a montar pollos, faltona y encima tramposa, con sus compañeros. No ganó, no, pero consiguió que sólo se hablase de ella. Como aquí mismo.