BOIG PER TU
La princesa cumple cincuenta
Cómo han pasado los años, cómo han cambiado las cosas, pero a pesar de lo que diga el popular bolero, para Belén Esteban (Madrid, 1973), los cambios, aun siendo importantes, han sido mínimos. Verdadero animal televisivo, hecho a sí mismo y con la aquiescencia entusiasta de su entorno, lleva viviendo, y bien además, de su relación, entre 1990 y 2000, con el torero Jesulín de Ubrique. Pocas personas han sabido sacar provecho de una situación que además aportó una hija en común, Andreita, la de “cómete el pollo” o “por mi hija mato”, dos iconos televisivos de primer nivel. Belén se ha dedicado en cuerpo y alma, desde su debut en plató en 2002, a despotricar de su ex y cómo generaba, ahora ya no sé si tanto, empatía por arrobas, acabó siendo la princesa del pueblo. Luego pasó a una etapa complicada entre problemas de salud, adicciones varias y relaciones sentimentales tóxicas. Afortunadamente ha superado todas las dificultades, incluso el cierre de su Sálvame. Ahora celebra su cincuenta aniversario y estrena reality-docudrama en Netflix.