BOIG PER TU
Inocentes muy cansinos
Cabe reconocer que la gala Inocente, inocente de La 1, de cada 28 de diciembre, se ha convertido ya en todo un referente navideño en televisión. Cierto, pero también lo es que cada vez provoca menos capacidad de sorpresa en el espectador, más allá de tomárselo como un divertimento y, además, para una noble y altruista causa. Así no es de extrañar que el show presentado por Juanma Iturriaga, con la ayuda de Cristinini, Carolina Casado y Jacob Petrus, no fuese lo más visto del día. Lo superó, con diferencia, la película de Antena 3 (El fuego de la venganza), pero también cabe decir que le pasó por encima al enésimo debate final de GH VIP de Telecinco, que se nos ha antojado –a nosotros y a la audiencia– ciertamente interminable. El caso es que las bromas a Álvaro Morata, Tania Llasera, Gonzalo Miró, Xuso Jones o José Luis García Pérez nos parecieron demasiado previsibles. Quizá la más original fue la que padeció el cantante Carlos Baute con una inteligencia artificial que, en un ejercicio de premonición, se volvió rebelde contra sus controladores.