Lazos más bien desatados

■ La 1 de TVE ha recuperado su recurrente Lazos de sangre, conducido por el incombustible Jordi González, programa que consiste en diseccionar los entresijos familiares del famoso de turno. El retorno giró en torno al torero Francisco Rivera, Paquirri, del que ahora van a cumplirse los 40 años de su mortal cogida en la plaza de Pozoblanco por el toro Avispado. Su audiencia fue más que discreta, un 7,7, pero ¿qué esperaban? Si la primera parte, el documental sobre su vida, estaba ya muy vista de aniversarios anteriores, el debate fue, por decirlo de alguna manera, francamente mejorable. Ninguno de sus tres hijos (Francisco, Cayetano y Kiko Rivera) quisieron ir y, por supuesto, su viuda, Isabel Pantoja, no estaba ni se la esperaba en el plató. En el documental sí que apareció porque el archivo de la casa es amplísimo. Llevaron, en cambio, a su primera novia, a la que dejó por Carmina Ordóñez, que aportó la información de que era muy tacaño, y a Bárbara Rey, recordwoman imbatible en salto de cama, que recordó la cruz de oro que llevaba encima en los momentos de mayor intimidad.