Ni escarmientan, ni quieren
Aquel viejo dicho de que el hombre es el único animal viviente capaz de tropezar dos veces con la misma piedra da la sensación de que no va con los CEO de las cadenas televisivas de este país. En este caso nos estamos refiriendo, aunque se puede aplicar a cualquier otra, a Atresmedia. Acaba de fracasar estrepitosamente con un especial de Pasapalabra, con la excusa de haber llegado a los mil programas emitidos, emitidos en el prime time de los sábados, cuando va a incurrir con idéntico error con otros como La ruleta de la suerte enviando al matadero a sus conductores habituales en la sobremesa, Jorge Fernández y Laura Moure. De nuevo, a las diez, minuto arriba minuto abajo, de la noche sabatina. Es verdad, aún no han debutado y ya les auguramos un mal final, pero es que no hace falta tener ningún máster en comunicación audiovisual para saber que sacar programas consolidados, y de hace años, además, en una franja horaria determinada y trasladarla a otra muy distinta, no es aconsejable. El target de su telespectador no es el mismo. Y, por tanto, a fracasar.