Bronca...no y menos Motos
Nos tendríamos que remontar veintitantos años atrás para encontrarnos con algo similar. En aquel entonces, la guerra era radiofónica, entre José María García (Cope) y José Ramón de la Morena (SER), en el campo de batalla radiofónico y al filo de la medianoche. Fueron meses, años, de batalla sin cuartel, con golpes bajos y triquiñuelas insospechadas para ponerle la zancadilla al rival en aras a la audiencia. Y, ¡ojo! Sin redes sociales. Ahora la pesadilla ha vuelto. En este país, el nuestro que no entiende de términos medios, o se es de Broncano o de Motos. Y la cosa ya cansa, la verdad, aunque comenzara mucho antes de que La revuelta viese la luz. ¿O ya no se acuerdan de la batalla por el sueldo? En casa, Broncano no nos provoca empatía y Motos es un pésimo entrevistador. ¿Y si fuera cierto, como se dice, que todo no es otra cosa que una componenda pactada para beneficiarse ambos y ganar así seguidores? A lo mejor, al acabar los programas se van juntos de copas y se ríen de lo crédulos que pueden llegar a ser los espectadores en general y los de X, en particular.