Abuela de rompe y rasga
Quim Masferrer, que nunca se olvida de pasar con su Foraster por localidades de Lleida, estuvo este lunes en Sant Guim de Freixenet, el “poble de l’estació”. Lo bueno que tiene este programa, cuyo peso recae en el hijo predilecto de Sant Feliu de Buxalleu, es que hace gala de una regularidad envidiable. Hay de mejores o de menos buenos, pero todos son muy similares. Su empatía con los visitados, hace que el nivel siempre sea medio alto. Esta semana hizo parada y fonda durante 48 horas en la localidad de La Segarra donde, en el monólogo final, pudo exclamar, a voz en grito, su tradicional “sou molt bona gent”. De entre toda la galería de personajes que desfilaron ante la cámara nos quedamos con Lina, la abuela centenaria de Gerard Piqué, ahora ingresada en una residencia de Cervera. Su vitalidad es impresionante. Y su mente aún está lúcida, pero quien nos llamó la atención fue el matrimonio formado por Núria y David, que sin necesidad de recurrir a manuales de autoayuda, dieron una verdadera lección sobre el duelo perinatal con su hija Violeta muerta antes de nacer.