Elogio a los profesionales de nuestra sanidad pública
SR. DIRECTOR:
Como otros muchos ciudadanos, en los últimos meses he tenido que utilizar de forma muy asidua la sanidad pública para paliar la enfermedad terminal de mi madre, Margarita. Quisiera que estas líneas fueran para manifestar públicamente mi más profundo y sentido reconocimiento a todo el personal que en el Hospital Arnau de Vilanova, en el Hospital de Santa María y en los servicios de paliativos han mostrado una extraordinaria profesionalidad unida a un exquisito trato personal siempre amable y cariñoso.
Como ciudadano me siento especialmente orgulloso de que mis impuestos sirvan para que la sanidad sea universal y esté en manos de personas tan cualificadas y con tanta humanidad. Este es un gran logro de la civilización al que no deberíamos renunciar nunca.
El progreso de la humanidad pasa por saber atender a la salud de quien lo necesita sin que los medios económicos sean ningún obstáculo. Muchas gracias a todos los trabajadores y trabajadoras de nuestra sanidad pública que nos hacen sentirnos orgullosos en todo el mundo.
