Balance del año municipal

El año 2016 ha sido intenso en el Ayuntamiento de Lleida. Después del período de adaptación necesario por parte de todos los grupos, la actividad municipal, con propuestas en las comisiones, y debates interminables en los plenos, ha sido, se puede decir, casi frenética.

Desde el Grupo Municipal del Partido Popular nos propusimos al inicio de la legislatura hacer oposición, que es donde los ciudadanos nos habían colocado, pero optamos porque esta oposición fuera constructiva.

Es decir, criticamos aquello que desde nuestro punto de vista no nos parece adecuado o pensamos que es perjudicial, pero intentamos presentar propuestas en positivo y llegar a acuerdos que sean beneficiosos para el conjunto de los lleidatans.

Estamos satisfechos, porque después de muchos años de lucha para bajar el IBI de Lleida, que tiene el dudoso honor de ser la capital de provincia más cara de toda España, gracias a un acuerdo con el equipo de gobierno se va a rebajar en un 3%, lo que supondrá un ahorro medio por recibo y por familia de 23 euros que buenos son de poderse ahorrar. Además y debido a la situación económica que afecta a muchas familias, la rebaja del IBI viene acompañada de una ayuda del 50% de la cuota anual a aquellas familias que menos recursos tienen. Este acuerdo se plasmó en los presupuestos donde fueron aceptadas todas nuestras enmiendas de las que me gustaría destacar el programa Integra. Siempre hemos dicho que la mejor política social es la creación de puestos de trabajo. Por eso este programa tiene como objetivo que aquellas personas especialmente vulnerables encuentren un trabajo adecuado a sus capacidades y mediante una labor conjunta entre los servicios sociales del Ayuntamiento y el IMO (Institut Municipal d’Ocupació).

También en la línea de crear ocupación nos sentimos satisfechos de la aceptación del Viver d’Emprenedors con ayudas a aquellos emprendedores que creen su primera empresa, y este año especialmente orientado al Centro Histórico, un barrio que es más necesario que nunca revitalizar para poder conseguir que la Seu Vella sea Patrimonio Mundial, y va a ser muy difícil alcanzar el objetivo si la entrada a nuestro monumento emblema de la ciudad no está en unas condiciones dignas. Esperemos que la recuperación del Parador Nacional del Roser contribuya a dignificar este barrio de nuestra ciudad.

La época de las obras faraónicas ya ha pasado a la historia. No están los tiempos para grandes construcciones, la situación de crisis económica, que afortunadamente ya estamos superando, ha hecho que las prioridades sean otras. Ahora nos hemos de centrar en las personas y en las necesidades que tienen. Las políticas sociales han pasado a ocupar un primer plano y en este sentido debemos seguir trabajando en continuar aplicando medidas contra la pobreza energética, la lucha para evitar el riesgo de exclusión social y por la construcción definitiva de un centro para personas sin hogar para que nadie en nuestra ciudad tenga que dormir en la calle.

Pero también continuaremos luchando contra la inseguridad, el incivismo y la ocupación ilegal con el objetivo de velar por el mantenimiento de un clima de convivencia social y respeto mutuo.

Nosotros no creamos problemas allí donde no los hay como hacen algunos que pretenden cambiar el nombre a determinadas calles solo por revanchismo político. El Grupo Municipal del PP creemos que aquellas personas insignes que trabajaron y sirvieron a la ciudad, son dignas de tener una calle con su nombre. Su crimen, haberse dedicado a la política y al servicio público durante la época franquista. Y es que vivieron en esa época, no en otra.

Desde el Grupo Municipal del PP continuaremos ejerciendo una oposición responsable y constructiva porque creemos firmemente que esa es la mejor manera de hacer política y ser útiles a nuestros convecinos.