VENT DE PONENT
Entre Waterloo y Puigcerdà
Es para quedar atónito de los destinos que han elegido los máximos representantes del procés para escapar de la justicia. Puigdemont ha elegido una vivienda de gran lujo en Waterloo, el lugar donde Napoleón caía en desgracia. Pero todavía más sorprendente es ver a la líder de la extrema izquierda independentista buscando refugio en Suiza, aquel país paraíso de los corruptos del PP y de la dominación capitalista patriarcal europea. Para mantenerse en una ciudad tan cara recibirán donativos. Por ejemplo esta noche habrá un acto para recolectar dinero en Puigcerdà. Allí se celebra cada año en el Polideportivo la fiesta de Trinxat, un acto popular en donde se cena ese plato tan suculento, y que desde hace tiempo acoge a los representantes políticos de todos los partidos. Pero resulta que hoy, además de lo tradicional, a las 20 h está convocada en la puerta una butifarrada, un acto para recolectar dinero para Anna Gabriel con la excusa de liársela a Arrimadas y a los diputados que como cada año asisten al evento. El lema es “en la Cerdaña no sois bienvenidos”. El alcalde de Llívia ha declarado a Arrimadas persona non grata y ha dicho que si ella asiste él no va. Poco ha tardado el alcalde de Puigcerdà en sumarse diciendo que éste año mejor no van los políticos, menos él y los de su cuerda. Ambos llevan mal que Ciudadanos ganara las elecciones catalanas; sí, lo repito, los más votados. Además, en Puigcerdà en concreto la formación naranja quedó en segundo lugar con el 27,4% de los votos, exactamente 1.238, a solo 88 votos de la primera fuerza. Lo repito para que el señor alcalde lo recuerde, a solo 89 votos de ganar en ese pueblo. La CUP allí consiguió tan solo 181 votos, el 4%. No obstante, es posible que aun así hagan mucho ruido, vuelvan a insultar y puede que como el otro día en el Parlament, increpen a quienes no piensan como ellos. Así que si mañana leen que hubo follón en el Trinxat no olviden que otra vez la liaron los de siempre. Pero estén seguros que aunque les moleste a algunos, Arrimadas, los diputados de Ciudadanos y tantos otros seguiremos en Cataluña con la cabeza bien alta disfrutando de nuestras fiestas, de nuestra calle y de nuestra libertad. Porque son de todos; también de esos pocos.