POUM 2018: los retos en el desarrollo de Lleida

El próximo miércoles se debatirá en el pleno municipal de la Paeria el nuevo Plan de Ordenación Urbanística Municipal (POUM), o lo que es lo mismo, la futura ordenación urbana y rural de la ciudad de Lleida para los próximos 10 o 15 años. Nuestro grupo municipal ha tenido la suerte de poder trabajar en este documento tan importante el mismo mandato en el que entramos en este consistorio por primera vez como tercera fuerza política. La complejidad de toda la articulación del POUM, por tanto, ha supuesto todo un reto del que estamos muy satisfechos a nivel general. Es importante que este plan cuente con la implicación de las distintas fuerzas políticas del consistorio y las necesarias aportaciones de vecinos, entidades y colegios profesionales. Las perspectivas demográficas del POUM del 1995 han pasado desde la burbuja inmobiliaria hasta la grave recesión económica y la caída de la inversión a partir de 2007. La diferencia entre este POUM de 2018 y el anterior es que el actual tiene en cuenta los últimos estudios demográficos y es más restrictivo en el crecimiento de la ciudad, siempre valorando la capitalidad de provincia que representa Lleida y, en ningún caso, limitando su capacidad de desarrollo económico y social durante los próximos años.

Valoramos positivamente la apuesta por la rehabilitación de los núcleos más antiguos de la ciudad vinculados a la construcción de vivienda nueva que responda a una demanda realista y que estas políticas vayan acompañadas de la consolidación de equipamientos, servicios y actividades económicas en el conjunto de nuestros barrios y partidas. El crecimiento de la ciudad en todo su alrededor debe acompañarse de la consolidación y planes de mejora urbanística en todo el centro histórico, pues de ello depende finalmente la consolidación de la trama urbana. Como decíamos, para nuestro grupo municipal es prioritario reconocer el papel de Lleida como capital de provincia, como receptora de personas que, a pesar de vivir fuera de la ciudad, realizan aquí su actividad profesional y académica. La regulación de la movilidad y la mejora de las conexiones internas y externas debe ser una de las principales metas de este nuevo POUM, quedando fijado, por ejemplo, la ubicación de los carriles bici que hasta día de hoy aparecían dispersos en las diferentes calles y avenidas de Lleida. Por lo que respecta a las conexiones externas, como principal novedad, incluímos la progresiva implantación de los llamados aparcamientos disuasorios, que no planteamos como una penalización al vehículo privado (tan necesario para muchos usuarios durante su día a día) sino como una mejora de la movilidad urbana con el atractivo de poder dejar aparcado el vehículo en las entradas de la ciudad y disfrutar de conexiones rápidas, económicas y flexibles hacia el centro de la misma.

Debemos destacar el papel principal que otorgamos a la Horta, con la próxima Ronda Verde, que promoverá itinerarios seguros para peatones y ciclistas, preocupándonos especialmente de la permeabilidad de la misma, de manera que no haya obstáculos en ningún desplazamiento en todo el término municipal, y que será una nueva oportunidad de ocio y unión entre el centro y la periferia, siempre en convivencia y dando preferencia a los usos productivos de la Horta, sin los cuales no la podríamos entender tal y como es hoy en día.

Así pues, prever el desarrollo de una ciudad a tan largo plazo es complejo, pero desde Ciudadanos creemos que el nuevo POUM nos permitirá sentar las bases de una ciudad más confortable, con respuestas a los retos de movilidad y transporte público futuros, una ciudad mejor para vivir y trabajar, dinámica y plenamente integrada con su entorno natural.