SEGRE

PERSONAS Y ORGANIZACIONES

En Navidad, persigue tu estrella de la felicidad

Creado:

Actualizado:

Permitidme en estas fechas en las que pesan más los recuerdos que el presente, que descarguemos de la carpeta de la memoria un spot que viene al caso. En este, el psicólogo Rafael Santandreu reunió y preguntó a varias parejas cuánto tiempo había pasado desde la última vez en que se vieron hasta el encuentro actual –estas estaban formadas por amigos, amigas, padres e hijos, excompañeros, etc–. Todos tenían dos puntos en común: estaban unidos por el afecto y separados por la distancia. Durante el encuentro, viendo la edad que tenían y echando mano de la estadística, nuestro psicólogo calculó y comunicó a cada pareja el número de veces que el futuro les permitiría volver a encontrarse –una, dos, tal vez tres–. La reacción de estos comenzó con gestos de incredulidad, pasó por los de tristeza y finalmente por una voluntad y compromiso de cambio que hacía imposible el pronóstico de la malvada estadística. Que la estrella de la navidad nos alumbre a todos y evite el agujero negro que muchas veces nos separa, no solo de los que tenemos lejos, sino también de los seres queridos que tenemos al lado.

En la vida y en el trabajo, actúa con prioridad

Siguiendo con la misma carpeta de la memoria, podemos descargar también el caso de aquel profesor de filosofía que, dejando sobre la mesa un frasco vacío, empezó a echar primero unas pelotas de golf, i preguntando a sus alumnos cómo estaba el frasco, estos contestaron que lleno. Añadió después unas piedras pequeñas y obtuvo una respuesta idéntica, siguió poniendo arena y obtuvo el mismo resultado, añadiendo finalmente dos vasos de cerveza. Nuestro profesor trataba de establecer un símil entre el jarro vacío con nuestra vida y entre las cosas que iba poniendo dentro del frasco y aquellas con las que vamos llenando nuestro día a día. Demostrando lo importante que es seguir un criterio de prioridad focalizado en nuestra felicidad, que nos lleve a poner en primer lugar las cosas grandes, entiéndase la familia, la amistad, la salud y después las más pequeñas y superfluas. Y como si en el caso de que lo hiciéramos así, el resultado es que en nuestra vida habría espacio para lo verdaderamente importante y quedaría aún espacio para otros aspectos más rutinarios, incluso para esas cervezas con nuestros amigos y nuestras amigas.

En fechas de tantas marcas, no olvides tu marca personal

Esta navidad, de descanso laboral para la mayoría, de trabajo intenso para los empleados del sector del comercio y de deseos de paz por parte de todos, nos invaden las naves de la publicidad. Vienen cargadas de marcas, pretendiendo y consiguiendo influir en nuestra voluntad de compra. En medio de tantas luces, mantén la tuya encendida, pues la de las marcas se irá desvaneciendo y se apagará apenas pasadas las fiestas de Navidad. La tuya, tu marca personal, cuídala, protégela, establece con ella un engagement emocional, pues deberá acompañarte hasta la próxima navidad.

tracking