Robots vs personas compiten por las entrevistas de trabajo

Cada vez con mayor frecuencia veremos en los medios de comunicación noticias sobre empresas, incluso sobre países, que están apostando por la realización de entrevistas de trabajo empleando robots. El caso más señalado es el de Corea del Sur, que con 55 millones de habitantes –número uno del mundo en el ranking de inversiones en I+D+i por habitante, con 1.500 dólares, y multiplicando por 4 el ratio que tenemos en España– da por hecho que en sus grandes empresas el 25% de las entrevistas de trabajo serán realizadas por robots. ¿Qué circunstancias hacen que una empresa se plantee el empleo de la Inteligencia Artificial (IA) en este campo? La primera, y más evidente, es gozar de un alto desarrollo tecnológico, y la segunda es contar con empresas de una gran dimensión, ya que en sus departamentos de recursos humanos entran centenares de miles de currículums, que hacen imposible un cribado por medios distintos a los de la Inteligencia Artificial (IA).

¿Han llegado a España los robots entrevistadores?

Empresas con presencia en España como L’Oréal, Unilever o Hyundai emplean ya la IA para filtrar los currículums que entran en sus departamentos de recursos humanos. Dice el profesor Rajiv Khosla, investigador australiano y creador de uno de estos robots, que éstos evitaran los sesgos y perjuicios que cometemos las personas cuando realizamos entrevistas, es decir, que los juicios que emitirán ellos sobre la idoneidad de un candidato no vendrán condicionados por nuestras imperfecciones como personas, como son nuestro grado de sintonía con una u otra forma de ser, nuestra forma de pensar sobre la igualdad de género, nuestros prejuicios asociados a una u otra nacionalidad, etc. Seguramente tendrá razón el profesor, y su robot será totalmente objetivo a la hora de comparar las competencias del candidato con las que se exijan para una determinada posición, pero de lo que no nos libraremos es de que el profesor de turno incluya como respuestas idóneas a la hora de valorar los candidatos aquellas que tienen que ver sobre cómo ve él las cosas y trasladar sus sesgos a los algoritmos que han de actuar como criterio de selección por parte de la nueva criatura de robot entrevistador.

¿Qué pensaría Darwin si levantara la cabeza?

Hablando de la necesidad de adaptarse a los nuevos entornos, en este caso el laboral, todos podemos recordar la teoría de la evolución de Darwin, en la que nos indicaba que las especies que acaban sobreviviendo son aquellas que son capaces de transmitir a sus sucesores rasgos que les permiten adaptarse mejor que los demás a los nuevos entornos. La autora Silvina Catuara Solarz, en su libro Cyborgs: la fusión de mente y máquina, se pregunta ¿Qué pensaría Darwin sobre la influencia de la tecnología en la evolución humana? Recordándonos como los “transhumanistas” sostienen que es posible mejorar la condición humana en todas sus formas a través de la ingeniería genética, la bioingeniería o la Inteligencia Artificial, y llegando a la conclusión que la evolución biológica podrá ser superada por las nuevas tecnologías que acelerarían artificialmente el proceso evolutivo.