Lidera tu economía personal

La economía personal inicia con la premisa de adquirir los conocimientos necesarios para administrar el dinero. La educación financiera es lo que marca la diferencia entre una vida con muchas complicaciones económicas o una vida financiera tranquila. Por varios años este tema ha logrado el interés de muchos, sin embargo hay que tener claro que enfocarse únicamente en el conocimiento no llevará a un cambio en nuestra economía.

Para explicar estas áreas de liderazgo y economía personal iniciaré con la base de las finanzas personales: el primer paso siempre será realizar un presupuesto. Pero ¿qué es un presupuesto? El presupuesto es una mirada al futuro que definimos en un contexto estable y normal. Escribimos una serie de datos y números que en términos económicos conocemos como ingresos y gastos en un determinado tiempo.

Pero resulta que la mayoría de las veces este presupuesto no es la realidad. ¿Por qué nos pasa esto? Bueno, porque no realizamos un presupuesto basado en los gastos e ingresos reales. Muchas veces nuestro presupuesto parte de lo que creemos o pensamos que gastamos y ganamos, y lo proyectamos a un año, sin tener presente que a lo largo de ese tiempo pueden ocurrir eventos que desvían nuestra proyección inicial.

Es en este momento cuando nuestras habilidades como líderes deben mostrar su valía para poder identificar que un presupuesto no solo debe estar basado en una realidad sino que debe contemplar dos escenarios: uno pesimista y otro en el que se incrementan los ingresos en un 30%. ¿Para qué hacer esto? La respuesta es simple, si se logra en este momento generar las estrategias correctas y tomar las decisiones adecuadas para momentos de crisis en nuestra economía personal, en el momento en el que ocurra ya sabemos qué hacer. Por otro lado, cuando nuestros ingresos aumentan, poder tener claros los objetivos para la distribución de este nuevo ingreso ayudará a visualizar en qué se utilizará, en qué se puede invertir para multiplicar más este dinero.

Permitirá ser autocríticos con nuestra acción, porque, si no hacemos esto, en seis meses como mucho ya estaremos igual que al inicio. . Sin importar si desarrollamos nuestro presupuesto en papel, en un programa o en una app, está claro que el sentido real de realizarlo es ver nuestro futuro y poder identificar oportunidades y amenazas, que simplemente se traducen en disminuciones y aumentos de nuestros ingresos y gastos. Pero no hay que quedarnos allí y enfocar nuestros esfuerzos en generar oportunidades que mitiguen las amenazas y en aprovechar nuestras fortalezas para generar acciones concretas que nos permitan administrar nuestro dinero de una forma estratégica y no operativa. Si aún eres de estas personas que solo anotan los gastos y los ingresos para que al final de mes te des cuenta de en qué gastas más o ves que no podrás pagar alguna cuenta, es momento de realizar un cambio, es tu oportunidad de aprender a administrar tus ingresos, porque cuestan en tiempo mucho más de lo que pensamos, porque sacrificamos muchas veces momentos inolvidables con personas especiales para lograr mantener nuestro trabajo.

Es el momento de ver tus ingresos y tus gastos como lo más importante para lograr tus metas y tus sueños, por eso mi mensaje es: “Destina tiempo a entender tu economía personal.” No sigas en lo operativo, es decir, analiza, genera escenario, pregúntate siempre “¿qué pasaría si...?”, lee, estudia, asesórate, aprende de tus errores y logra establecer una estrategia concreta que te permita desarrollar un plan acorde a lo que necesitas y a lo que deseas lograr para tu vida. Recuerda, reinventa tus finanzas..