LA CRÍTICA DE JUAN FERRER
Veraneando a la francesa
País: Francia.
2018. Comedia.
Dirección: Eloise Lang.
Intérpretes: Camille Cottin, Miou-Miou, Camille Chamoux.
Cines: Screenbox Funatic
Ese es el retrato de tres mujeres en busca de unos días de felicidad –pese a ellas mismas–, de hacer piña en momentos difíciles, de reencontrarse y de apoyarse mutuamente, cosa que también es discutible, y en definitiva, de esquivar por un tiempo esa soledad que ninguna aparenta tener, y las tres sufren a su modo, a veces incluso sin querer admitirlo.
Con unos mimbres a simple vista muy básicos, la directora Eloise Lang moldea esta comedia también aparentemente fácil de desarrollar, buscando el enredo en la isla, aventuras a varias bandas, malos entendidos, actitudes infantiles y no poco desmadre que los personajes van provocando con artimañas y pactos que bien podían acabar más en drama que en comedia. Lo que sucede es que esa liberación interior, esa nueva mirada a los códigos materno filiales, esa decisión de abrirse aunque por momentos sea disparatado, marcan un sello propio, el de una producción muy francesa, abierta y descarada, sin prejuicios, en ocasiones incluso nada correcta, y con el aliciente de dejar entrar otros personajes en la trama que también aportan más lío y descaro, pero que promueve los afectos, marca actitudes y cambios. Y entre los rincones de una historia sencilla y corriente se manifiestan sentimientos introspectivos, de aprendizaje porque es lo que en definitiva la película propone, aceptarse y ser aceptado, quererse y vivir la vida. Vacaciones con mamá tiene el atrevimiento de ser natural, no esconde nada, no lo pretende siquiera, y eso, sin ser la comedia del año, se agradece porque refresca la mente y se deja ver sin complejos ya que al fin y al cabo, su propósito principal es precisamente intentar hacer reír y ser amable, sin dejar de ser pícara, incluso desvergonzada y eso sin duda, a la película le sienta muy bien.