El sol entre el diluvio

Mientras se celebran cumbres sobre el cambio climático en las que apenas nada prospera y poderosos países miran hacia otro lado y el cine, a través de documentales que encogen el alma así como largometrajes de ficción que tienen más voluntad comercial que de otra cosa, el japonés Makoto Shinkai –que con películas como El jardín de las palabras o Your name se ha convertido en todo un referente del ‘Anime’–, a través de una bella metáfora que aúna dos mundos, el empíreo y el terrenal, advierte de una catástrofe más que cercana a través de dos personajes adolescentes, Hotaka, un joven que huye de la isla donde habita para conocer Tokio, y Akina, una joven con cualidades divinas capaz de hacer salir el sol esporádicamente en una ciudad donde la lluvia es permanente, donde en verano puede nevar; en la amenaza de que ya no hay marcha atrás y todo será inundación. Ante esa perspectiva, el realizador apoyado por una música que acompaña a la perfección de Radwimps y de una extraordinaria exposición de una ciudad húmeda y trabajada con tanto detallismo que impresiona por la maestría que evidencia, transcurre una historia con enorme lirismo, aunque las aventuras del muchacho en sus penosas experiencias en esa ciudad con señales apocalípticas y la voluntad de sacrificio de la chica que hace feliz a la gente despejando un cielo gris tengan que contrarrestarse con la presencia de almas bondadosas y momentos sensibles. Vocación ecologista entre lo fantástico y lo real, una mirada al mundo juvenil y a sus problemáticas con el mundo adulto y riqueza visual permanente, El tiempo contigo es un canto a la amistad en un amenazador clima cambiante.