CRÍTICADECINE
Reivindicar al héroe
Dirección: Clint Eastwood.
Intérpretes: Paul Walter Hauser, Sam Rockwell.
Cine: JCA Alpicat, Urgellenc (Tàrrega).
Eastwood, con un estilo narrativo excelente, utiliza el caso real de Richard Jewell, un tipo singular, con sus luces y sus sombras, enmadrado, enfermizo en eso de salvaguardar el orden y en su obsesiva fe patriótica, que durante los Juegos Olímpicos de Atlanta evitó muchas muertes a raíz de un acto terrorista, pasando a ser del héroe por excelencia, admirado por todos, a caer en desgracia de la noche a la mañana al convertirse en el principal sospechoso del FBI, ya sea por negligencias de un agente o por la ferocidad informativa de una periodista que hizo grande la burbuja y desencadenó el infierno para un ciudadano abrumado por las circunstancias y respaldado tan solo por un abogado desenvuelto y directo.
Eastwood, perro viejo en eso de filmar, narra de modo preciso este caso, le insufla valores que en la película casi nadie posee, busca la verdad aún a costa de contrariar a algunos al retratar personajes sin ética, al mostrar momentos engañosos en la personalidad y las formas de los acusadores, y coloca en su sitio a cada uno tan solo mostrándolo ante la cámara porque la injusticia golpea y hay que reflexionar sobre ella. Y lo que es más, hay que poder actuar sobre ella.