Intenso drama tóxico
LA TUTORÍA
★★★★✩
Un supuesto ataque sexual entre dos niños de seis años de edad obliga a una profesora, al director del centro y a una psicóloga a enfrentar en un cara a cara a la madre del posible responsable y a los padres de la supuesta víctima de los abusos.Es un tema delicado el que La tutoría desarrolla con gélido aire nórdico, y un juicio de valor sembrado de dudas que cae sobre una madre de forma implacable pero al que, nada amedrentada, hará frente, sorprendida pero firme en sus ideas, sobre esa tela de araña que se va tejiendo sin sentido.Existe en la película una rivalidad feroz con uno de los personajes, y este hecho lo distorsionará todo a través de supuestas conjeturas entre mayores –los niños no aparecen en ningún momento en la trama–, haciendo grande el problema que amenaza con engullirlos, algo que ya vimos en Un dios salvaje (2011), de Roman Polanski, o en la magnífica La caza (2012), de Thomas Vinterberg. Pero el joven realizador noruego Halfdan Ullmann Tøndel –nieto nada más y nada menos que de Ingmar Bergman y Liv Ullmann– no traza una película al uso, un drama encerrado en sí mismo, sino que descoloca en un segundo tramo, primero con un interminable ataque de risa de la protagonista, que pone de los nervios, y posteriormente con una secuencia surrealista, abstracta, de un baile por los pasillos, y así hasta cerrar un final complejo, enrevesado pero descriptivo, sobre la condición humana, del mal que se puede ejercer partiendo de un acto simple y que puede llegar hasta las últimas consecuencias. Todo se desdibuja y reconstruye asociando nuevas acusaciones, nuevos reproches con ira y rencor, enfrascándose ya no en los hechos del presente sino en el pasado, en la vida privada, originando una ruptura insalvable teniendo en cuenta que todos ellos son familia.El realizador busca originalidad en sus giros hacia momentos singulares y sorprendentes que, tal vez, no encajen en algún sector del público, pero hay en la figura de Renate Reinsve una interpretación portentosa y esforzada. Una actriz que ya deslumbró con La peor persona del mundo (2021), de Joachim Trier, y capaz de ofrecer todos los matices con una naturalidad innata, incluso en los tramos en los que se desarrollan chocantes escenas pensadas para desordenar el entorno.La tutoría, galardonada en Cannes con la Cámara de Oro a la mejor ópera prima, aparte de las rarezas creadas por Ullmann Tøndel, es un intenso drama sobre la toxicidad, sobre la chispa que puede provocar un incendio de gran magnitud sin tener en muchos casos la capacidad para sofocarlo.