La noche dedicada al folk-rock del Festival Músiques Disperses MUD 2019 dio juego, no hay duda alguna. Uno de los más recientes descubrimiento de los programadores del festival, el dúo Kacy & Clayton, venía avalado por un álbum maravilloso, The Siren’s Song, editado hace algo más de un año bajo supervisión del gran Jeff Tweddy, jefazo de los Wilco, que aplicó al suave folk-country vocal de los canadienses unas texturas psicodélicas que han hecho las delicias de los aficionados. En plan desnudo, solo voces y guitarras, nos quedamos un poco con las ganas de saborear ese mundo propio, pura alquimia, que reúne tradición musical de ambos lados del Atlántico y que rezuma calidez y gran belleza por todos sus recovecos, y que en la grabación demostraba tener muchos más matices, detalles luminosos que en esta ocasión en vivo, por desgracia, no viajaron con ellos. The Parson Read Heads, a mi entender, el auténtico plato fuerte de la noche y uno de mis combos preferidos de última generación, nos regalaron un muy hermoso concierto, sacando a relucir sus más infalibles armas musicales. A saber: melodías infalibles, guitarras frondosas y armonías vocales encantadoras con el matrimonio formado por Evan Thomas Way y Brette Marie dando lo mejor de sí mismos al servicio de un catálogo espléndido de canciones por su altísima calidad creativa. Aunque se explayaron en Yeraling y Blurred Harmony, a mi juicio sus dos mejores álbumes, también hubo espacio para dar a conocer temas recientes recogidos en Long Distance, la última entrega discográfica editada por Way bajo la nueva nomenclatura The Phasers. Tanto para sus seguidores veteranos, como es mi caso, como para los que los acababan de descubrir –bastantes, sospecho–, la experiencia resultó agradabilísima, poniendo de manifiesto su enorme carisma personal y musical.