¡¡Valientes!!

Brighton 64, la legendaria banda barcelonesa fundada hace casi cuarenta años por los hermanos Albert y Ricky Gil, ha dejado para la posteridad algunas de las mejores páginas del pop-rock de ascendencia e inspiración sixties. Y es que tantos años de carretera y grabaciones, incesantes reencarnaciones y reinvenciones, juntos o en divergencia (Brigatones, Matamala, Top Models, Chest o las etapas diversas de los propios Brighton) han dado lugar a un fabuloso acervo en forma de canciones que resisten y de qué manera al paso del tiempo. En esta tercera edad del grupo de máxima madurez, iniciada a caballo de la primera y segunda décadas del siglo XXI, estos músicos de honestidad y decisión inquebrantables han puesto en circulación cuatro long plays mayúsculos, defendidos en directo con la pasión y rabia que siempre les ha caracterizado. Asimismo, han mantenido una sincera fidelidad a Lleida y a su ramillete de entusiásticos militantes mod, granjeándose con gente de aquí estrechas amistades personales y hasta una relación profesional con nuestra más conocida editorial. En su última visita a Ponent presentaron Como debe ser, su más reciente y combativo álbum, la mar de apropiado para los años convulsos que estamos arrastrando y sobre los cuales, valientes donde los haya, han optado por decir la suya y no esconder la cabeza como muchos avestruces musicales instalados en la equidistancia. Pudimos disfrutar de su interesante mixtura musical, alquimia hiriente de protesta inteligente y agudos guitarrazos rock & roll, surtiendo de alegría nuestro espíritu y reconfortándonos el cuerpo ante lo bueno o malo que pueda llegar. Soberbios..., como de costumbre.