¡¡Im-pre-sio-nan-tes!!

JAZZ

Voy a empezar citando los nombres de los cinco súper músicos que conforman The Black Art Jazz Collective. A saber, la sección de metales compuesta por el saxo de Wayne Escoffery, el trompetista Jeremy Pelt y James Burton III, al trombón, y la base rítmica protagonizada por el pianista Víctor Gould, Jasen Weaver al contrabajo y el drummer Mark Whitfield, todos ellos potentes intérpretes capaces de elevar a los altares ese enorme hard bop suyo que no deja a nadie indiferente. La verdad es que había mucha expectación y el público llenó prácticamente la platea del Salo d’Actes de la Universitat de Lleida y como el espectáculo tuvo tanta calidad y altura, los comentarios a la salida fueron, cómo no, entusiásticos.

El álbum que traían bajo el brazo, Ascension (2020), grabado durante la pandemia, denota en su escucha las ganas enormes que tenían, esos meses de confinamiento sin poder actuar en vivo, de dar lo mejor de sí mismos instrumentalmente y un fenomenal savoir faire compositivo con piezas casi todas propias y de gran relevancia musical. Así este primer viaje a Europa los ha motivado tanto y tantas ganas tenían de tocar ante espectadores, que sus presentaciones en esta gira están siendo realmente fantásticas. Amigos gallegos o de Badajoz, por ejemplo, que tuvieron ocasión de escucharlos poco antes de venir a Lleida, ya nos advirtieron que el encuentro con ellos sería espectacular.

como así ha sido, en efecto. Su show trajo hasta aquí un sonido de reminiscencias añejas pero que sonaba bellamente contemporáneo, sin embargo, tanto por los solos de cada músico como por las intervenciones a base de diferentes combinaciones entre ellos, que fueron magníficos y nos trajeron al pensamiento a auténticos monstruos del género como Miles Davis, John Coltrane, Herbie Hancock o Wayne Shorter, que tanto los inspiran. La tensión ambiental en positivo fue tal que los asistentes no paramos de ovacionar todas sus interpretaciones, durante y al final de cada una de ellas.¡¡IM-PRE-SIO-NAN-TES!!.