EDITORIAL
La imparable subida de la luz
Ayer fue día de récords: de personas atendidas por el frío, de temperaturas bajas, de consumo eléctrico y paralelamente, también del precio de la luz, que sube justamente cuando aumenta el consumo y en unas proporciones preocupantes. El ministro del ramo ya ha reconocido que el recibo de la luz nos puede costar unos cien euros más al año y justifica la subida de precios por la climatología, con poco viento y poca lluvia que han dejado los embalses a medias, la subida del petróleo y la paralización del parque nuclear francés, pero desde la Comisión de la Competencia se quiere estudiar la “inquietante” subida del precio mayorista de la luz en diciembre y su presidente afirmó que investigarán si estas subidas se deben a cuestiones técnicas o bien a comportamientos indebidos de los agentes del sector. No sería la primera vez, porque el ministro Soria ya tuvo que suspender una subasta en diciembre de 2013 por la espectacular subida aprobada por los agentes y también se llegó a sancionar a una eléctrica, Iberdrola, por disparar artificialmente el precio de la luz. En esta ocasión, llevamos seis meses con precios al alza y pasamos de un precio medio en la subasta de 39 euros por megavatio/hora a 60 euros en diciembre, llegándose a los 64 euros el 1 de enero. La escalada llegó al tope ayer en la subasta que fija el precio para el día siguiente con 92 euros para la franja horaria de las 20 horas, todo un récord que dobla el precio de hace tres meses y supone un incremento del 50 por ciento con respecto al precio de principios de año, y todo apunta a que en la subasta de hoy, si las advertencias del Gobierno y de Competencia no surten efecto, volverán a batirse récords en la subasta mayorista. Es significativo que el precio de los carburantes suba siempre en vísperas de puentes o de salidas de vacaciones y que el de la luz se multiplique en las épocas de consumo récord y hace tiempo que se han criticado posibles acuerdos entre los operadores para fijar precios al alza, sin que los sucesivos gobiernos hayan tomado decisiones reguladoras. El mecanismo de fijación de precios en el sector eléctrico siempre ha sido criticado por su opacidad y por la influencia decisiva que tienen los operadores para marcar precios, pero hasta ahora no se ha acometido su reforma pese a que el ministro Soria lo anunció tras suspender una subasta. Sube la luz y las eléctricas ganarán más, pero que no digan que es porque no llueve.