EDITORIAL
Mesa sectorial del esquí
El President Puigdemont se reunió el sábado en la Vall de Boí con la patronal del esquí catalana Acem para abordar las necesidades y el futuro de este sector, vital para el turismo de montaña de Lleida. En el encuentro, en el que también estaban los consellers de Territorio y Empresa, Josep Rull y Jordi Baiget, respectivamente, se planteó convertir en una mesa estratégica lo que ahora son encuentros informales. La idea de tratar cuestiones comunes en todos los complejos, desde las inversiones, accesos, cambio climático o tramitación de proyectos y promoción, fue bien recibida por los representantes de las pistas dado que, si bien viven una de las mejores temporadas de los últimos años, tienen retos del próximo futuro a resolver y que pueden marcar el futuro del esquí. Porque si bien es cierto que las problemáticas de Baqueira y las de las dos estaciones del Pallars poco tienen que ver, no es menos verdad que la climatología y el relevo generacional de aficionados afectan a todos por igual, por poner solo un ejemplo. Como también tienen una problemática similar para mejorar las carreteras y ampliar la oferta de après-ski y alargar la estacionalidad de las temporadas, o buscar otros usos fuera de ella. Bienvenida sea, pues, la iniciativa, porque el Pirineo necesita estabilizar la actividad blanca, así como ampliarla al resto del año con un turismo de calidad y sostenible. Animac crece con el sectorPocos esperaban en aquella primera edición de Animac, a la que justo asistieron dos mil personas, que veinte años más tarde se acercarían a los 30.000 los visitantes y que de las cien películas de aquel año, la gran mayoría cortometrajes, se pasarían a los dos centenares, entre ellos siete largometrajes de primer nivel. Animac ha ido creciendo en la misma proporción que lo ha hecho el sector, que ha pasado de ser un reducto de público infantil con dibujos hechos a manos, a vivir un apogeo gradual gracias a las múltiples posibilidades que el entorno digital ha abierto a los creadores. Desde series a cortos y largometrajes o publicidad, la animación se ha hecho un nombre propio en el cine y la televisión con un potencial sin límite.