Pequeñas explotaciones en extinción

Fruticultores de Lleida protagonizaron el viernes una tractorada por las calles de la capital para protestar por los bajos precios que perciben. Denuncian que son los que reciben menos ingresos de todos los componentes de la cadena que lleva la fruta desde el campo hasta el consumidor. La crisis de precios en este sector se ha convertido en casi permanente en los últimos años. Quedan muy lejos en el tiempo los beneficios que generaba su cultivo en los años sesenta, setenta e incluso principios de los ochenta, cuando bastaban unas pocas hectáreas de frutales para que una familia pudiera ganarse la vida más que holgadamente. En la actualidad, los productores se han convertido en el eslabón más débil de una cadena donde la gran distribución impone su ley. Los mensajes de que una de las grandes asignaturas pendientes del sector agrícola leridano, y más concretamente del de la fruta, era el de controlar toda la cadena hasta llegar al consumidor final, se remontan a hace ya unos cuantos lustros. Sin embargo, la plasmación práctica de esta teoría ha quedado muy lejos de las expectativas y la realidad es que incluso se está produciendo el proceso inverso, con empresas distribuidoras que se están convirtiendo en productoras mediante la compra o arrendamiento de parcelas. De lo que no hay duda es que las pequeñas y medianas explotaciones agrarias son otras de las víctimas de la globalización económica en favor de las grandes empresas y de unos pocos agricultores que consiguen dar el salto hacia la gran producción. La unidad inédita de la UE Los 27 jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea mostraron ayer una imagen inédita de unidad al sellar en 15 minutos las directrices a seguir para negociar el Brexit con el Reino Unido, lo que contrasta con las sesiones maratonianas habituales para cualquier acuerdo. Habrá que ver si el Brexit puede ser un acicate para revitalizar la UE en pleno auge de los partidos euroescépticos favorecido por una burocrática gestión de la crisis al dictado de Alemania y de los grandes poderes económicos o si, como es más que probable, será flor de un día.