EDITORIAL
El pulso está planteado
El anuncio de la Generalitat de que inicia los trámites para comprar 8.000 urnas de metacrilato y otras 4.000 de cartón es un gesto real y ya no solo simbólico de su firme decisión de celebrar el referéndum, tal como ratificó el vicepresidente Junqueras desde Estados Unidos, y un pulso al Gobierno central que, tras el consejo de ministros de ayer, insistió en que impedirá el referéndum y que actuará la fiscalía si el anuncio se traduce en hechos. De paso, el ministro portavoz advirtió que los autos del Tribunal Constitucional implican no solo a los políticos, sino también a los funcionarios de la administración catalana e incluso a las empresas proveedoras de servicios que puedan colaborar en un acto prohibido expresamente por el Constitucional. Pero de momento no se atisba ninguna ilegalidad en el anuncio del Gobierno catalán que abre un concurso para la adquisición de urnas con licitación a cargo del departamento de Gobernación y responsabilidad en la compra de todo el ejecutivo en uso de las competencias que tiene sobre la regulación y organización de procesos participativos. Mientras no se hable de referéndum, no hay litigio posible y esta parece ser la estrategia del gobierno catalán para retrasar la actuación de la fiscalía y dotarse de toda la infraestructura, papeletas, urnas, censo o junta electoral, sin dar oportunidad a actuar a Madrid, pero evidentemente cuando se convoque se planteará el conflicto y habrá recursos de fiscalía con previsible intento de paralizar el proceso. ¿Qué pasará entonces? Es lo que nos gustaría saber a la mayoría de ciudadanos, independentistas o no, en ejercicio del derecho a la transparencia y porque también influirá en nuestra toma de decisiones. Injusticia administrativaPerder una beca académica como le ha sucedido a una estudiante de la UdL porque su madre percibió 1.500 euros del Plan Pive cuando se cambió el coche es una injusticia aunque se haya superado en unos míseros 55 euros el baremo de ingresos exigidos. Se castiga a una estudiante con buen expediente que estudiaba gracias a la beca por un detalle del que nadie informó a la familia.