Moratoria de purines

El sector porcino atraviesa un momento dulce con las mejores cotizaciones de los últimos tres años y pujanza de las exportaciones porque España produce un 50 por ciento más de lo que consume, pero en las jornadas de Agrobank ya se advirtió del peligro de crear una burbuja por exceso de producción y también del riesgo que representa la eliminación de purines con la opinión de algunos expertos de que las plantas de cogeneración no son la solución al problema medioambiental.

El problema en las comarcas de Lleida, con 2.800 granjas y 4,8 millones de cabezas que representan el 55 por ciento de la carne de cerdo que se produce en Catalunya, se agudiza por la proliferación de purines y la posible contaminación de los acuíferos.

En este sentido, hay una amenaza real de sanciones comunitarias porque la directiva del agua obliga a recuperar la calidad de las aguas y la misma Generalitat admite que en los últimos veinte años no ha habido cambios significativos en la calidad de las aguas subterráneas en lo que se refiere a nitratos porque las medidas adoptadas hasta ahora no han sido suficientes.

En consecuencia, Agricultura considera imprescindible “restringir o parar el crecimiento ganadero en algunas zonas”, concretamente en las que tienen más concentración de granjas y de purines, y ya tiene ultimado el decreto por el que se impedirá la construcción de nuevas granjas o la ampliación de las existentes en siete municipios de Lleida: Mollerussa, Miralcamp, Golmés, Puiggròs, Soses, Rosselló y Bellmunt. En principio los sindicatos aceptan la moratoria, mientras los ecologistas piden que se amplíe, pero es evidente que no soluciona la eliminación de purines, que exige más medidas.

Precaución en las piscinas

El día 7 fue en Mollerussa y el martes se repitió el caso en Guissona con dos niños que están a punto de morir ahogados en las piscinas municipales, tienen que ser salvados por los socorristas y evacuados a un centro hospitalario en estado crítico. Por suerte, los niños se recuperan, pero hay que extremar la prudencia para que si no saben nadar utilicen la piscina adecuada y evitar posibles cortes de digestión.