EDITORIAL
El choque de trenes ha llegado
La Generalitat convocó ayer el referéndum del 1-0 después de que Junts pel Sí y la CUP aprobaran por vía exprés la ley de la consulta con sus 72 votos a favor, las 11 abstenciones de una CSQP fracturada y el rechazo, plasmado con su ausencia de la cámara, de los 52 diputados restantes de Ciutadans, Partido Popular y PSC en un maratoniano y crispado pleno del Parlament en el que los grupos independentistas impusieron su mayoría, con la oposición cargando contra la falta de garantías para el debate y dilatando tanto como les permitió el reglamento y la presidencia de la cámara la votación final. Paralelamente, el Gobierno español ya ha anunciado que hoy mismo se reunirá el presidente Mariano Rajoy con el líder de los socialistas Pedro Sánchez para dar una respuesta consensuada a la Generalitat y a su hoja de ruta e invita al TC a anular todo lo aprobado y a abrir la vía penal para las decisiones tomadas ayer. El choque de trenes está pues servido y si bien es cierto que el muro y el inmovilismo con el que se ha encontrado hasta ahora Catalunya en su mayoritario deseo de más autonomía política y económica no deja muchas salidas ni alternativas, también lo es que los gobiernos no pueden ni deben abocar a la ciudadanía a vivir en una zozobra legal. Veremos en los próximos días si el diálogo se impone y los ciudadanos pueden expresar su voluntad sin que los derechos de unos socaven a los de otros. Enésimo accidente en la N-240La N-240 se cobró ayer una nueva víctima, la enésima, en una carretera vital para la conexión de Lleida con Tarragona y su única alternativa gratuita para llegar al puerto natural de Ponent, al lugar de segunda residencia de miles de leridanos y su playa natural, en la vía que une dos de las capitales catalanas y con ciudades intermedias con mucha movilidad, tanto hacia Lleida como hacia Tarragona, como son Les Borges, Montblanc y Valls. La desidia con la que hace años se acomete el desdoblamiento de esta carretera o la liberación de peajes de la AP-2 es inaceptable y además del problema de tráfico tenemos sobre la mesa el luto de muchas familias.