EDITORIAL
La lucha contra el cáncer
Cincuenta mujeres de Lleida están participando en un estudio del IRBLleida para detectar los tumores de endometrio más agresivos. Una investigación pionera que lleva a cabo el equipo dirigido por el doctor Xavier Matias-Guiu, responsable del grupo de Patología Oncológica del IRBLleida y jefe de servicio de Anatomía Patológica del hospital Arnau de Vilanova. Este trabajo se presentará la próxima primavera en un congreso internacional en EEUU. Matias-Guiu es precursor en la exploración en Lleida y de hecho fue director del IRBLleida en su primera andadura. Pero este no es el único avance que los científicos de Lleida están desarrollando con ensayos o investigaciones que ayudan a que quienes padecen cáncer vayan ganando día a día en esperanza de vida. Ayer se celebró el Día Mundial contra este mal, cuyo objetivo es salvar millones de muertes prevenibles cada año mediante la sensibilización y la educación sobre la enfermedad, presionando a los gobiernos y personas de todo el mundo para que tomen medidas y destinen fondos a la investigación y la prevención porque no olvidemos que al menos un tercio de todos los casos pueden prevenirse y que constituye la estrategia a largo plazo más eficaz. El tabaquismo, la falta de actividad física, aspectos alimentarios, obesidad y sobrepeso son factores de riesgo que las diferentes campañas contra el humo, con sus leyes correspondientes, intentan frenar pero queda un largo camino por recorrer para que la lucha contra esta dolencia, que ha mejorado mucho, tanto en curación como en visibilidad y desestigmatización, no vea frenados sus avances por los recortes gubernamentales ligados a las crisis económicas y a la poca cultura de mecenazgo en este ámbito. El cáncer es una de las causas principales de muerte en todo el mundo, responsable de 8,2 millones de fallecimientos anuales. Sin embargo, sabemos que un tercio de estas muertes se puede evitar y que muchos tipos son curables si se detectan a tiempo. Hasta que se consiga crear una mayor conciencia y se emprendan acciones a escala mundial seguirán muriendo millones de personas al año en todo el mundo de forma innecesaria. Tenemos que actuar ya porque la epidemia es de enormes dimensiones y se prevé que vaya en aumento. Se estima que pasaremos de 14,1 millones de casos en 2012 a 19,3 millones de casos anuales en 2025. Tomemos conciencia de ello.