EDITORIAL
Un Aplec plural y multitudinario
El Aplec del Caragol cerró ayer puertas con un balance de unos 200.000 visitantes en tres días que se han convertido en la fiesta más fraternal y multitudinaria de Lleida. Los más de 13.000 peñistas pueden darse por satisfechos porque de los 160 atendidos ninguno ha revestido gravedad y porque pese a la crisis política que vivimos no se produjo ningún enfrentamiento remarcable. Todos los participantes han podido expresar sus opiniones, el presidente de la Generalitat, Quim Torra, recibió un auténtico baño de masas y de solidaridad y los que piensan diferente también le hicieron llegar al mandatario catalán con total normalidad y civismo su discrepancia. Este espíritu de tolerancia y respeto al prójimo es sin duda una señal de identidad de la forma de ser de los leridanos y catalanes en general, reivindicativos de lo propio pero respetuosos con lo foráneo. Buena muestra de este interés por superar fronteras lo demuestra la peña de Perpinyà presente en el Aplec y las gestiones para que en la próxima edición se inscriba una de China. Remarcar también el éxito de las iniciativas solidarias de la presente edición, como la ‘xollada’ para recaudar fondos contra el cáncer, que sumó 2.500 euros después de cortar el cabello a 250 personas. Felicitar pues a los peñistas, en primer lugar, por este ejemplo de sana diversión y a los leridanos, en general, por sumarse a la iniciativa de forma masiva. Un reportaje de SEGRE detallaba el domingo los logros asumidos en estos 39 años y los retos de infraestructuras que quedan pendientes para la celebración del 40 aniversario, que los organizadores comenzarán a preparar a partir de hoy mismo para hacer de esta fiesta un encuentro internacional turístico de primer nivel. Irlanda rompe con su pasado Irlanda rompió con su pasado, culminó su modernización social y mandó un poderoso mensaje al mundo al aprobar, por un contundente 66,4%, la legalización del aborto. El histórico resultado del referéndum, nuevo hito en una corriente feminista global e imparable de la revolución de las mujeres que avanza.