EDITORIAL
El desvío de camiones
A falta de inversiones que solucionen realmente el problema, se siguen buscando parches que rebajen la siniestralidad en la N-240 y el último es el anuncio del Servei Català de Trànsit y el ministerio de Fomento por el que se desviará por la autopista de peaje la circulación de camiones entre Les Borges Blanques y Montblanc. La medida se ha anunciado conjuntamente con el desvío también obligatorio en la N-340 entre Vilafranca del Penedès y Altafulla y entre L’Hospitalet de l’Infant y Alcanar, y es idéntica a la que ya se aplica desde 2013 en el tramo norte de la N-II en Girona. En estos tramos de Tarragona y Girona, la medida puede ser efectiva, pero en el leridano llama la atención que la parte más conflictiva y en la que más accidentes se registran, de Lleida a Les Borges, quede excluida del desvío obligatorio. Cabe recordar, por otra parte, que ya se aprobó en 2015 un desvío voluntario para camiones, con bonificación del 50 por ciento, entre Lleida y Montblanc que prácticamente no tuvo incidencia en el tráfico. Ahora se plantea de forma obligatoria y de momento los transportistas de Lleida ya proponen, si no tienen otras opciones, la gratuidad del peaje o bien establecer un carácter voluntario para el desvío con una bonificación del 75 por ciento. En los presupuestos del Estado hay una partida de 12 millones para compensar a la concesionaria de la AP-2 y otras autopistas del Estado por la rebaja de peajes, pero no parece fácil el acuerdo. Si se aplica esta medida debería incluirse el tramo Lleida-Les Borges, pero hay que insistir que el objetivo deseable es liberalizar el uso de la autopista, cuya concesión caduca en 2021, fecha en que debería pasar a ser de uso público. El cine, en crisis Nada menos que un 77 por ciento ha caído en tres años la recaudación por taquilla del cine catalán y el dato es preocupante porque también ha bajado la producción. Desde el sector culpan a la crisis, a la falta de ayudas públicas, a la caída de la producción propia de TV3 y también al impacto del IVA. Ayer se hizo realidad la bajada del brutal 21% al 10% que debería servir para abaratar las entradas.