Freno a los presupuestos

La Mesa del Congreso, en la que tienen mayoría PP y Ciudadanos, tumbó ayer la enmienda que el PSOE y Podemos pretendían introducir para eliminar la capacidad de veto que tiene el Senado, donde el PP tiene mayoría absoluta, con la ley de estabilidad presupuestaria, introducida por el gobierno de Rajoy en 2012 y que concede a la cámara alta la última palabra en esta ley, a diferencia de lo que sucede con las demás, en las que la tiene el Congreso. La enmienda había sido aprobada por la mesa de la comisión de Justicia, en la que tienen mayoría PSOE y ERC, y no tiene precedentes esta rectificación, aunque la presidenta del Congreso se ampara en la doctrina del Constitucional para rechazar la enmienda por no tener relación con la ley que se tramita, que es una reforma de la ley orgánica del poder judicial para mejorar la formación de los jueces en caso de violencia de género, aunque los socialistas sostienen que esta práctica la han utilizado todos los gobiernos y sí hay relación porque sin presupuestos no hay partida para la formación de los jueces. Más allá del choque institucional entre Gobierno y Congreso, la clave está en que si no se aprueba la enmienda difícilmente podrán aprobarse los nuevos presupuestos que prevén un incremento del techo de gasto en 6.000 millones que el Gobierno quiere destinar a inversiones en políticas sociales para hacerlas visibles antes de las elecciones del año que viene. Y aunque Sánchez ha insistido en que quiere agotar la legislatura, también parece evidente que sin presupuestos y con la precariedad de apoyos que tiene su gobierno, se vería abocado a un adelanto electoral que muchos socialistas no ven con malos ojos porque interpretan que en estos momentos saldrían favorecidos. De hecho, las encuestas divulgadas ayer confirman que el PSOE sería el partido más votado, mejorando en cinco puntos el porcentaje del 21-D, mientras que el PP bajaría once puntos, de los que Ciudadanos recuperaría siete aunque seguiría en tercer puesto, con Podemos en cuarto lugar, con seis puntos menos. Son encuestas, pero reflejan que el PP atraviesa momentos difíciles, que Ciudadanos y Podemos quedaron descolocados con el gobierno Sánchez y que los socialistas aún no han empezado a notar desgaste por sus titubeos y aún están en la cresta de la ola del triunfo de la moción de segura. Y con solo 84 diputados y una oposición feroz, el futuro se le puede complicar al PSOE.