La situación de Rodalies y el Prat

Jornada de caos en Rodalies Catalunya, una más. Una avería en la estación de Barcelona Sants provocó ayer demoras de más de una hora en los trenes de varias líneas, incluida la de Lleida por la costa (R14). La incidencia se produjo por un fallo en el sistema de señalización. Técnicos de Adif se desplazaron y Renfe reconoció el importante alcance de las consecuencias del fallo. Paralelamente, en el aeropuerto de El Prat, las colas, los mostradores llenos y la incertidumbre de miles de personas por la huelga que comenzó a las 00.00 horas de anoche se hacía evidente y volvía a convertir el Josep Tarradellas en un desorden generalizado. Y así, un mes y otro, y un año y otro, por una falta de inversiones flagrante, un retraso en las prometidas indignante y un agravio comparativo en relación con otros aeropuertos o cercanías intolerable. La situación política y los estiras y aflojas entre el Gobierno español y el catalán no pueden ser la excusa perpetua para no afrontar de una vez por todas la modernización de los trenes de Rodalies ni para no equiparar el personal y las inversiones en El Prat a las de Madrid Barajas. Tanto el ejecutivo central como la Generalitat deben anteponer el bien común de todos los catalanes a los intereses partidistas de sus representantes; lo contrario ni es justo ni contribuye a mejorar la actual tensión entre Catalunya y las administraciones públicas españolas.Nuevas costumbres